¿Hay vida después de la TDT?

La Televisión Digital Terrestre (TDT) ha puesto patas arribas a las cadenas de la Gran Sevilla, donde se han concedido 12 licencias privadas y cuatro públicas. Los consistorios y las empresas que se han quedado fuera del reparto buscan en el cable o en internet una alternativa para seguir emitiendo.

En la era de la TDT no estarán todas las que son. Por eso, muchas televisiones –públicas y privadas– trabajan a marchas forzadas para hallar la fórmula que evite su desaparición. Ideas hay para todos los gustos: televisión por cable, por internet, vuelta al vídeo comunitario o reconversión en productora. Sin embargo, a la hora de hacer números no todas las propuestas cuadran y muchos proyectos en el área metropolitana se están desechando antes incluso de ponerse en marcha.

Para la Gran Sevilla, la Junta de Andalucía reserva cuatro canales públicos de TDT que tienen que repartirse 46 municipios distribuidos en tres demarcaciones (Sevilla, Dos Hermanas y Utrera) a través de la constitución de un consorcio que los gestione. Tras esta tarea, nada fácil de antemano, está la de plantear una programación conjunta para todos los municipios, que tendrán que compartir también gastos, equipos, personal y beneficios.

De las tres televisiones públicas del área metropolitana, la que está más avanzada es la del Aljarafe, que incluye a 20 de los 29 municipios de la demarcación. De este proyecto se descolgaron finalmente Bollullos de la Mitación, Espartinas y Tomares, aunque este último no descarta entrar en un futuro próximo.

Bollullos de la Mitación tiene su propia televisión municipal y las reticencias del equipo de gobierno (PP) a compartir la programación hizo que aún no hayan tirado la toalla. Por eso, según fuentes municipales, “se están barajando alternativas” para continuar emitiendo sin tener que compartir su parrilla con el resto. El caso de Espartinas es diferente. Hoy día no opera desde el municipio ninguna televisión, ni pública ni privada, y aunque se inició un estudio para poner en marcha un proyecto por internet al final “se desechó porque no era viable”, según fuentes municipales.

Más lentas van las cosas en las televisiones públicas de las demarcaciones de Utrera y Dos Hermanas. Para la primera (que compartirá emisión con Los Palacios y Villafranca) aún no se han dado ni los pasos iniciales. Un poco más avanzado está el proyecto en la demarcación de Dos Hermanas, para el que ya se han iniciado las primeras gestiones y en el que se incluyen Alcalá de Guadaíra y otros ocho municipios.

Reconversión.

Mientras tanto, la indignación se ha apoderado de muchos de los canales privados que se han quedado sin licencia de TDT. Es el caso de Televisión Carmona, que está en antena desde hace 16 años y que es vista en municipios como Lora del Río, Osuna, Marchena o La Luisiana. Sin embargo, aseguran, van a “seguir luchando” por poder continuar emitiendo. En la misma situación se encuentran otras televisiones históricas como Antena Oromana, con sede en Alcalá de Guadaíra, o Teleutrera.

Desde la Asociación de Televisiones Locales de Andalucía (Acutel) consideran que las limitaciones de la TDT provocarán una pérdida de la “televisión de proximidad”. La única salida para las privadas es “reconvertirse en productoras para recuperar la inversión que han hecho durante muchos años”, aseguran. Y precisamente, eso es lo que se están planteando muchas.


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