La fase final del cambio de las emisiones televisivas en analógico al sistema digital (TDT), comenzará a finales del próximo 10 de marzo, informó hoy José Antonio Quintela, director de la Oficina Nacional de Transición a la TDT.
Quintela, quién ha señalado que este apagado final concluirá el 3 de abril, ha declarado que España es el primer país europeo que culmina el pase a la TDT "en una situación muy compleja".
El adelanto de la fecha de apagado -que en algunos países será en 2012 y así estaba inicialmente previsto en España- para el 2010 ha favorecido a las empresas españolas y España en este aspecto se ha convertido en una referencia para el resto de países europeos.
José Antonio Quintela quiso destacar que este proceso de transición a la TDT "se está haciendo con normalidad, a pesar de que se esta sustituyendo una red de distribución de señal, que se ha desarrollado a lo largo de 50 años, por otra que se está desplegando ahora, lo que conlleva alguna pequeña dificultad".
Las campañas de información continúan, en coordinación con las comunidades autónomas y a partir del próximo lunes, miembros de la Oficina Nacional de Transición a la TDT mantendrán 48 reuniones con los más de 2.000 personas que faltan para ser informados del cambio y de cómo y cuando llegará la nueva señal.
Estas reuniones se desarrollarán a lo largo de mediados del mes de febrero hasta primeros de marzo, "donde se pasará de tratar problemas generales a los particulares" y se mostrarán, en las emisiones analógicas, rótulos informativos de que el período de transición finaliza.
El Plan de la TDT preveía que los operadores privados debían extender la cobertura de su señal al 96 por ciento del territorio nacional y las televisiones públicas el 98, lo que cumplieron a mediados de diciembre pasado.
Para conseguir llegar al 96 por ciento de cobertura, las privadas necesitaron 1.900 centros oficiales y para cubrir el 3 por ciento restante hasta el 99 por ciento son necesarios 2.750 centros de extensión de cobertura "que no requiere gastos grandes, pero que tienen su coste. Es aquí donde se hace un esfuerzo".
José Antonio Quintela ha querido destacar las diferencias entre ambos sistemas de distribución de señal, como que el paso a la TDT permite optimizar el espectro radioeléctrico y una mayor compresión de la señal.
La diferencia es que un canal analógico tan solo contiene un programa de televisión, mientras que un canal digital permite 4 programas de televisión, audio, un sistema de subtitulación y la interactividad.
En cuanto a la valoración ciudadana sobre este proceso de transición, Quintela ha informado que en una encuesta realizada a finales de noviembre, cuando ya se habían apagado 22 proyectos, el nivel de satisfacción de los ciudadanos mereció una nota de 6,6.
El 87 por ciento consideró que la imagen era igual o mejor que la analógica y el 78 por ciento se mostró satisfecho o muy satisfecho por el nivel de información, aunque, según Quintela, el grado de satisfacción ciudadana crece conforme se van realizando otras encuestas.
+ info en: http://www.google.com/hostednews/epa/article/ALeqM5gxIn1aiH2a89JVwjKvfuJ8FGlM1g
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